El nuevo modelo de cotización de los Autónomos (por el que se contribuirá a la Seguridad Social en función de los rendimientos netos obtenidos) ha cumplido un mes y ya ha generado un cierto nivel de “incertidumbre y sorpresa” entre el colectivo.
Con el fin del mes de enero, los autónomos han tenido que abonar la primera cuota del año 2023. Pese a que se espera que los primeros efectos del nuevo modelo se produzcan a partir del 1 de marzo, ya contamos con distintos tipos de casuística que no “van a ayudar” a gestionar la transición del modelo. En concreto, se trata de los siguientes supuestos.
- Nuevos autónomos 2023 entre el 1 y el 9 de enero (unas 8.000 personas). Por error se les ha cobrado la cuota mínima pese a haber solicitado la aplicación de la tarifa plana (una cuota reducida de 80 euros). Se les ha cobrado 300 euros. La Seguridad Social ha reconocido el error y ya ha anunciado que procederá a la devolución de oficio próximamente.
- Autónomos con tarifa plana 2022. A algunos se les ha cobrado una cuota de 80 euros y a otros la cuota íntegra de 300 euros cuando les correspondía la cuota vigente para la tarifa plana en el 2022 (60 euros). La Seguridad ha reconocido el error y ya ha anunciado que procederá a la devolución de oficio próximamente.
- Autónomos con revalorización automática de base de cotización (lo decide el autónomo). En estos casos, la cuota de enero recoge la actualización de la base (incremento del 8,6% sobre la base de cotización de diciembre de 2022) y el nuevo tipo de cotización (un 31,2% en lugar del 30,6% aplicable en diciembre de 2022). Por ejemplo, un autónomo que cotizaba en diciembre del 2022 por la base mínima, abonó 294 euros; la cuota de enero de 2023 le ha supuesto 325 euros (29 euros más). Este supuesto está ajustado a la normativa vigente.
- Autónomos sin revalorización automática de base de cotización (lo decide el autónomo). En estos casos, la cuota de enero recoge únicamente la actualización del nuevo tipo de cotización (un 31,2% en lugar del 30,6% aplicable en diciembre de 2022). Por ejemplo, un autónomo que cotizaba en diciembre del 2022 por la base mínima, abonó 294 euros; la cuota de enero de 2023 le ha supuesto 300 euros (6 euros más). Este supuesto está ajustado a la normativa vigente.
Nos comprometemos a seguir informando sobre las incidencias y novedades que probablemente se van a seguir produciendo en las próximas semanas con el fin de que el colectivo de autónomos disponga de la información cierta y suficiente para tomar decisiones en un ámbito tan relevante para todos como es el mantenimiento de su bienestar personal y familiar.