En SURNE, los cálculos han arrojado un CSO (Capital de Solvencia Obligatorio) de la entidad a 31/12/2015 de 27,5MM de euros.
Al igual que el resto del sector, SURNE ha presentado ya sus cálculos regulatorios en base a Solvencia II, la nueva directiva europea de cálculo de solvencia en las entidades aseguradoras que entró en vigor a principios de año y que ha visto ya los primeros resultados de las entidades correspondientes al ejercicio 2015.
En SURNE, los cálculos han arrojado un CSO (Capital de Solvencia Obligatorio) de la entidad a 31/12/2015 de 27,5MM de euros. Así mismo, el CMO (Capital Mínimo Obligatorio) ha sido de 7,2MM de euros. Por su parte, los fondos propios calculados según la nueva directiva ascenderían a un total de 91,5MM de euros.
Esto supone un ratio de solvencia de SURNE del 332% sobre el CSO y un 1264% sobre el CMO. Dicho de otra forma, esto quiere decir que, según la normativa de Solvencia II, SURNE cuenta con una solvencia tres veces superior respecto a lo que indica la norma, y doce veces superior respecto al mínimo exigible para seguir operando en el mercado.
SURNE pone así de manifiesto una vez más sus altos niveles de solvencia para la tranquilidad de sus clientes y asegurados, unos niveles ya demostrados también con la anterior fórmula de cálculo, menos exigente en cuanto a capital que la nueva directiva de Solvencia II.
En SURNE, los cálculos han arrojado un CSO (Capital de Solvencia Obligatorio) de la entidad a 31/12/2015 de 27,5MM de euros. Así mismo, el CMO (Capital Mínimo Obligatorio) ha sido de 7,2MM de euros. Por su parte, los fondos propios calculados según la nueva directiva ascenderían a un total de 91,5MM de euros.
Esto supone un ratio de solvencia de SURNE del 332% sobre el CSO y un 1264% sobre el CMO. Dicho de otra forma, esto quiere decir que, según la normativa de Solvencia II, SURNE cuenta con una solvencia tres veces superior respecto a lo que indica la norma, y doce veces superior respecto al mínimo exigible para seguir operando en el mercado.
SURNE pone así de manifiesto una vez más sus altos niveles de solvencia para la tranquilidad de sus clientes y asegurados, unos niveles ya demostrados también con la anterior fórmula de cálculo, menos exigente en cuanto a capital que la nueva directiva de Solvencia II.