Comparar se ha vuelto hoy en día una necesidad. El exceso de ofertas para todo tipo de productos y la escasez de recursos económicos derivados de la actual crisis han obligado al consumidor a racionalizar el gasto y a cuidar con mucho más celo cada céntimo que sale de su cartera.
En este sentido, Internet se ha convertido en un poderoso aliado para el consumidor ya que permite un acceso más sencillo y completo a la información de las ofertas existentes en el mercado. Adicionalmente, la web 2.0 está permitiendo que, además de poder acceder a la información general del producto o servicio (la que facilita la compañía que lo comercializa), podamos acceder a información extra proporcionada por otros consumidores, que mediante el relato de sus experiencias en blogs, foros y páginas de opinión pueden ayudar a un consumidor indeciso en su toma de decisiones, inclinando la balanza hacía una oferta u otra.
“Comparar” e “Internet” se han vuelto dos palabras prácticamente inseparables. Tanto es así, que cada día más usuarios acceden a internet para informarse, y no solo para la compras reflexivas como comprar un coche o una tele, sino que cada vez con más frecuencia el consumidor se acerca a Internet también para sus compras menores, como encontrar un buen restaurante o comparar productos de consumo habitual.
El Auge de los comparadores de seguros online
Ante este panorama, en el sector asegurador han aflorado en los últimos años gran cantidad de páginas web denominadas “comparadores de seguros”. Su principal función es tratar de facilitar la tarea de comparación de ofertas a los consumidores que buscan el seguro más barato, ofreciéndoles “online” el precio que costaría su seguro en las aseguradoras adheridas a su panel. El auge de estos comparadores o agregadores de seguros es grande en nuestro país (más de 1 millón de visitas al mes en 2012, según la consultora comScore).
El principal hándicap que presentan estos comparadores es que valoran el precio del seguro por encima de cualquier otra consideración (no se valora la calidad de las coberturas, duración, franquicias, Calidad Servicio…) y el panel de la comparativa aparece siempre ordenado en base al criterio “precio”. Esto puede ser muy útil para quien busque el seguro de vida más barato, pero… ¿y qué pasa con quién busque el mejor seguro de vida?
El Mediador, un comparador que siempre ha existido
Pero este afán por comparar, por buscar y conseguir la mejor oferta, no es nuevo para el sector asegurador. Podríamos decir que los mediadores de seguros son ese “comparador” que siempre ha existido y, aunque es cierto que no ofrecen al cliente la misma inmediatez y autonomía de los comparadores online, sí que disponen de algo de lo que los comparadores online adolecen: la experiencia de muchos años comercializando seguros y la capacidad de adaptarse a las necesidades reales de cobertura del cliente, no solo a su realidad económica.
Además, la mediación también se ha modernizado y cuenta con sofisticadas herramientas de cotización online de seguros, muchas de ellas facilitadas por las propias compañías (como los Portales de Mediadores) y otras herramientas de backoffice que les permiten obtener online y de forma ágil la tarificación de los seguros en aquellas compañías con las que trabajan.
De esta forma, el mediador ve facilitada su tarea de ofrecer a sus clientes el mejor seguro posible (que no necesariamente será el seguro más barato), y el cliente cuenta con la tranquilidad adicional de saber que su servicio postventa estará gestionado por un profesional de Seguro, que le facilitará cualquier gestión que deba realizar durante la vida de la póliza contratada.
Moraleja: Comparemos sí, pero con cabeza
En resumen, comparar cada vez se hace más necesario en un entorno actual en el que los recursos económicos se reducen y la oferta de productos y servicios se multiplican intentando conseguir clientes. Internet y las nuevas tecnologías se han convertido en un potente aliado del consumidor que puede acceder cada día a más información, y de forma más horizontal. Comparar hoy es más fácil y más necesario que nunca.
Los comparadores de seguros online son una buena herramienta que puede ayudarnos durante la fase de decisión, e incluso pueden ser una buena opción para la contratación directa de los productos más “comoditizados” como Vida o Autos… pero no siempre nos darán suficiente información para decidir por ejemplo cuál es el mejor seguro de dependencia o el mejor plan de pensiones en base a nuestras necesidades personales, ya que lo único que comparan es el precio, no la calidad de las coberturas contratadas.
Así pues, salvo que vayamos exclusivamente buscando el mejor precio para nuestro seguro, no deberíamos olvidarnos del valor añadido que un mediador puede aportarnos gracias a su experiencia en el sector y su trato más humano, capaz de entender nuestras necesidades reales de cobertura para cubrirlas con el producto que más se ajuste a ellas.
Comparemos. Es nuestra “obligación” como consumidores responsables. Pero hagámoslo con cabeza y, cuando lo creamos conveniente, acudamos a profesionales con experiencia para que puedan asesorarnos adecuadamente antes de contratar un seguro, y así evitar que tengamos que lamentarnos después.